sábado, 2 de agosto de 2014

PIROPOS


Los piropos en la calle, son tan comunes en nuestro diario vivir, bueno en el de ellas más que en el de nosotros...





Los piropos son una forma de alagar a las mujeres, de exaltar su belleza; claro está que hay algunos un poco pasados, por no decir que en su gran mayoría, como estos:

Mami me gustaría ser baldosa, para poder verte la cosa.
Huy mamita así es como me la recomendó el doctor, PERO EN POLVO.
Me gustaría ser mantequilla para derretirme en tu arepa.
Mami como quisiera ser profesor de tercero para pasarte al cuarto.
¡Mi amor!, tú con tanta carne y yo sin dientes.
Mami muéstrame una teta que yo me imagino la otra.
Mami preséntame a tu ginecólogo para chuparle los dedos.
Con esa pierna... ¿Para qué la otra?
Con ese culo debes cagar bombones.
Quien fuera hambre para darte tres veces al día.
Si así está el camino como será el pueblo mi amor.

Hay algunos más elegantes, estos son muy poco escuchaos pero existen, como estos:

Si Cristóbal Colón te viera diría: Santa María, que Pinta tiene esta Niña.
Si amar es un delito y besar un contrabando, llamen a la policía que me estoy enamorando.
Tantas curvas y yo sin frenos.
Si la belleza es pecado, no tienes perdón de Dios.
Quién fuera bizco para verte dos veces.
Donde venden la rifa para ganarme este premio.
Solo he pensado en ti dos veces: cuando te conocí y el resto de mi vida.

Este tipo de freces y halagos están catalogados como acoso sexual callejero, un mal con el que las mujeres han aprendido a vivir todos los días; seamos claros ustedes como yo alguna vez en la vida los hemos usado, y si no, por lo menos un adiós en voz alta para que nos escuchen hemos recitado con lo que sin darnos cuenta hemos vulnerado a una mujer, quizás algo más grave la hemos ultrajado con frases que para nosotros van de la simpleza de exaltar a una mujer.

Es hora de acabar con el abuso sexual callejero, es hora de parar, ya no más mujeres vulneradas. si los piropeados fuéramos hombres quizás llegaría el momento en que también nos molestaría, aunque sería excitante escuchar a mujeres decirnos en la calle cosas como estas:

Tienes algo que hacer? Podemos hacer turismo por mi cuarto.
Me gustaría ser pirata para coger el tesoro que tienes entre las patas.
Si así es el chorro comino será la manguera.
Te estudio o te trabajo?
Mi rey, cómo caminan las tortugas? ... ... apacito, apacito.

Esos huevitos si están para estrellarlos.



ESTEBAN VALDERRAMA